Todas las mujeres nacen con una cantidad fija de óvulos en su cuerpo que pueden ser fertilizados por espermatozoides para crear una nueva vida. Sin embargo, junto con la cantidad de huevos disponibles, la calidad de esos huevos también juega un papel importante en la concepción exitosa de un hijo.
Un óvulo sano debe tener el número correcto de cromosomas y la capacidad de combinarse con los cromosomas del esperma. Es posible que los óvulos de mala calidad no tengan la cantidad correcta de cromosomas, lo que hace que el embarazo sea muy poco probable. Los óvulos también necesitan mucha energía para dividirse correctamente después de la fertilización. A medida que envejece, sus óvulos tienen menos energía para dividirse, lo que dificulta la formación de un embrión sano.
Las mujeres de entre 20 y 30 años suelen tener una gran cantidad de óvulos de buena calidad y muy pocos desfavorables. Para cuando estén cerca de los 30, probablemente tengan más óvulos de mala calidad que de buenos, lo que reduce las posibilidades de lograr un embarazo exitoso. Otros factores que pueden reducir la calidad de la reserva ovárica son la mala salud, la mala genética, hábitos como el tabaquismo, enfermedades como la endometriosis, la radiación y la quimioterapia.
Incluso si la concepción es posible a partir de un óvulo de mala calidad, las posibilidades de llevar al niño a término son muy bajas. Después de la fertilización, es posible que los óvulos de menor calidad no se puedan implantar correctamente en el útero o que no sean lo suficientemente sanos para dividirse y crecer, lo que resultará en un aborto espontáneo.
Las pruebas para determinar la calidad del óvulo generalmente se realizan en mujeres de 30 años o más e incluyen pruebas como la FSH de 3 días o las pruebas de estradiol, que son análisis de sangre que se realizan el tercer día de su ciclo menstrual. Los niveles altos de FSH o estradiol son un indicador de mala calidad del huevo. La fertilización in vitro (combinación del óvulo y el esperma en un laboratorio) también se puede realizar para determinar si el óvulo crecerá.
Tener óvulos de baja calidad no significa que no pueda quedar embarazada. ReproMed Fertility Center ofrece pruebas de diagnóstico avanzadas y soluciones de tratamiento de fertilidad que pueden personalizarse para ayudar a maximizar sus posibilidades de lograr un embarazo y tener un bebé sano. ¡Concierte hoy mismo su cita!