La fertilización in vitro (FIV) es una de las técnicas de tecnología de reproducción asistida (ART) que puede ayudar a las parejas infértiles a tener un bebé biológicamente relacionado con ellas. La FIV es un procedimiento clínico complejo. El proceso implica la recolección de óvulos maduros de los ovarios y su combinación con los espermatozoides en el laboratorio. Después de la fertilización, los óvulos se implantan en el útero de la mujer. Es un procedimiento invasivo y que consume mucho tiempo, que tarda alrededor de 2 semanas en completarse un solo ciclo de fertilización.
Las indicaciones más comunes para la FIV incluyen:
- Trompas de Falopio dañadas o bloqueadas.
- Problemas de ovulación.
- Insuficiencia ovárica prematura (pérdida de la función normal de los ovarios antes de los 40 años).
- Endometriosis severa (presencia de tejido endometrial fuera del útero).
- Presencia de fibromas uterinos (tumores benignos en la pared del útero).
- Infertilidad por factor masculino, que incluye un recuento bajo de espermatozoides y una baja movilidad de los espermatozoides.
- Presencia de un trastorno genético.
- Para preservar la fertilidad de pacientes con cáncer u otras condiciones de salud.
- Infertilidad inexplicable. Los siguientes pasos están involucrados en el tratamiento de FIV:
- Inducción de la ovulación: El médico administrará medicamentos para la fertilidad para estimular la producción de óvulos. Se realizarán ecografías transvaginales para monitorear el desarrollo de los óvulos y análisis de sangre obtenidos para verificar los niveles hormonales.
- Extracción de óvulos: Su médico realizará una aspiración folicular, un procedimiento quirúrgico menor para extraer los óvulos de sus ovarios. Se inserta una sonda de ultrasonido a través de la vagina y dentro de los folículos bajo guía ecográfica. Cada folículo del ovario se perfora para recuperar el óvulo.
- Inseminación y fertilización: Los óvulos se mezclan con el esperma en una cámara ambientalmente controlada para facilitar el proceso de inseminación. El óvulo se fertiliza unas horas después de la inseminación. Si la probabilidad de fertilización es baja, se puede usar la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) donde los espermatozoides se inyectan directamente en el óvulo.
- Cultivo de embriones: La división del óvulo fertilizado forma un embrión. Se controla el desarrollo del embrión y en 5 días, un embrión normal tiene varias células en división activa.
- Transferencia de embriones: La transferencia de embriones se realiza de 3 a 5 días después de la extracción y fertilización del óvulo. Se inserta un tubo delgado que contiene uno o más embriones en la vagina a través del cuello uterino hasta el útero. Después de la transferencia, si un embrión se adhiere o se adhiere al revestimiento del útero, el resultado es un embarazo.
- Riesgo de nacimientos múltiples.
- Riesgo de nacimiento prematuro y bajo peso.
- Síndrome de hiperestimulación ovárica (SHO) (una condición de agrandamiento de los ovarios acompañada de acumulación de líquido en la cavidad abdominal).
- Aborto espontáneo.
- Los riesgos de la extracción de óvulos incluyen sangrado, infección y daño al intestino, la vejiga o los vasos sanguíneos.
- Posibilidad de embarazo ectópico o tubárico.
Como la transferencia de embriones se realiza bajo la guía de un ultrasonido, tendrá la vejiga llena durante el procedimiento. Podrá vaciar la vejiga después del procedimiento. Durante los primeros dos días después de la transferencia de un embrión, debe abstenerse de levantar objetos pesados, realizar actividades físicas como correr o hacer aeróbicos, nadar, beber alcohol, fumar y tener relaciones sexuales. Puede hacer una prueba de embarazo 10 días después de la transferencia de embriones para confirmar el embarazo.
Como ocurre con cualquier procedimiento quirúrgico, pueden surgir riesgos y complicaciones. Las posibles complicaciones asociadas con pasos específicos de una FIV incluyen: