Los fluidos cervicales, también conocidos como moco cervical o secreción cervical, son una secreción normal de las glándulas del cuello uterino. Proporciona un medio alcalino que nutre los espermatozoides y ayuda a que los espermatozoides se muevan hacia el útero para fertilizar el óvulo. La consistencia de su moco cervical varía según los cambios hormonales. El seguimiento de los cambios en el moco cervical puede decirle mucho sobre su fertilidad y puede ayudarla a quedar embarazada.
Si bien el cuerpo de cada mujer es diferente, en general debería poder distinguir los siguientes cambios en la consistencia del moco cervical:
- Moco cervical escaso o pegajoso: Esto es una indicación de que aún no está ovulando. El cuello uterino en este punto es un entorno hostil para los espermatozoides.
- Moco cervical cremoso: Su tiempo de ovulación se acerca en breve.
- Moco cervical acuoso y ligeramente elástico: Su tiempo de ovulación está muy cerca. Ahora es el momento de prepararse para las relaciones sexuales.
- Moco cervical muy húmedo y muy elástico que se asemeja a la clara de un huevo crudo: Esto es una indicación de que la ovulación es inminente, y el moco cervical proporcionará el ambiente perfecto para que los espermatozoides prosperen. Este es el momento ideal para las relaciones sexuales.
Las formas de verificar los fluidos cervicales incluyen frotar con el dedo dentro de la vagina para verificar la consistencia del moco cervical, otras opciones serían examinar la consistencia de la secreción en su ropa interior o en el papel higiénico después de orinar, prestando mucha atención a la consistencia que cambia cada día.
Cuando use este método para determinar el momento adecuado para tener relaciones sexuales para lograr el embarazo, debe evitar revisar el moco cervical cuando esté excitada, ya que los fluidos de excitación son diferentes del moco cervical, pero es posible que no pueda distinguir la diferencia entre ellos.